¿Qué preguntar en la primera cita?
Última actualización: 28 Septiembre 2018
Las citas a veces pueden ser aterradoras con esos momentos incómodos de silencio que atacan los nervios o todos esos temas de conversación que no habías predicho.
Incluso si sabes cómo dominar la primera cita, siempre hay algunos puntos a tener en cuenta para asegurarte que la conversación siempre fluye y hay buen ambiente. Las preguntas son una buena manera de conocer a la persona que tienes delante. Probablemente ya hayáis compartido muchos detalles a través de la web de citas en la que os habéis conocido, pero el primer encuentro siempre es una gran oportunidad para ir un paso más allá…
Romper el hielo: los 15 primeros minutos de la primera cita
Sin duda, los primeros minutos son clave para las primeras impresiones, los primeros sentimientos, las primeras palabras… ¡La primera pregunta! Estos son los primeros factores desencadenantes que establecerán el tono del resto de la cita. Es por eso que es importante empezar con preguntas generales para romper el hielo de forma natural. Una buena manera de empezar a conversar es preguntándole cosas como si ha encontrado fácilmente el sitio en el que os habéis reunido o qué novedades ha habido después de la última vez que hablasteis.
Pero obviamente, en la moderación encontrarás el equilibrio. No avasalles a preguntas y asegúrate de escuchar a tu cita. Al principio te encontrarás con formalidades, pero eso es normal. Recuerda que las mejores conversaciones son aquéllas en las que hay un intercambio equilibrado de palabras. Haz que la interacción sea de lo más agradable. Pregunta, escucha y contesta. Intenta no escudriñar demasiado y en vez de eso, muestra interés en lo que dice.
De temas generales a cosas específicas
Si eres una persona atenta, las preguntas que se hacen durante los primeros minutos de la cita deberían ser unas buenas fuentes de información a retener sobre tu cita. Probablemente encontrarás otro momento durante la cita para usar esa información y preguntar cosas más específicas. ¡Es la mejor manera de demostrar a tu cita que eres una persona considerada y atenta!
Un error importante a evitar es lanzar muchas preguntas a la otra persona haciéndola sentir como si estuviese en una entrevista de trabajo. ¡La idea es mantener el tono divertido e informal!
Preguntar cosas más concretas sin ser demasiado inquisitivo debería ser la mejor manera de descubrir la verdadera personalidad de tu cita. Además, es una forma interesante de observar su lenguaje corporal. ¡Nunca subestimes lo que su cuerpo realmente puede decirte!
Si ves que tu cita realmente se implica cuando le preguntas, acorta las distancias entre vosotros y sonríe de forma natural, ¡probablemente estés realizando las preguntas adecuadas!
Otra manera de hacer una pregunta es dando previamente información sobre ti mismo o sobre algunas actividades que hayas realizado recientemente.
Diversión vs. romanticismo
Las primeras citas pueden ser muy excitantes e interesantes una vez has conseguido meterte de lleno en la conversación. Aunque tal vez el ambiente esté empezando a ser algo más relajado, ¿todavía no has podido alcanzar ese grado de intimidad que estás buscando?
Tanto si estás intentando evocar memorias de tu niñez para enseñarle a tu cita tu toque sensible o empiezas a hacer una lista de cosas que no se te dan bien para así crear algunos momentos divertidos, piensa que el humor y el romance sin duda son dos de las mejores armas para forjar una amistad e incrementar la afinidad.
Son muchas las preguntas que puedes hacer para crear una dinámica de diversión y romanticismo: desde las habilidades secretas de tu cita, su juguete favorito, su destino de ensueño, un momento de suerte hasta lo más embarazoso que le ha ocurrido cuando estaba en la escuela.
Siempre ten en cuenta las reacciones de tu cita. Si ambos lo estáis pasando bien y las distancias se están acortando, probablemente os habréis descubierto de forma atractiva e interesante.