Segunda cita: Cine & Restaurante
Última actualización: 13 Marzo 2019 por Thaïs
Todo el mundo se centra en hacer que su primera cita sea un éxito. En internet puedes encontrar centenares de artículos con consejos para triunfar en un primer encuentro, pero lo que no te dicen los expertos en citas es que las segundas citas son las importantes como las primeras. La segunda cita es perfecta para introducir a tu ligue en tu mundillo y mostrarle qué es lo que te gusta y algunas cosas que haces en tu día a día. La gran mayoría de solteros son un matojo de nervios en una primera cita y están tan estresado que se olvidan de ser ellos mismos. La segunda cita es la excusa perfecta para mostrar tu verdadero “yo”. ¿Cuáles son los planes más punteros para una segunda cita? En el nuevo capítulo de nuestra Guía Paso a Paso para Iniciar una Relación tras 5 Citas, te ofrecemos algunas ideas para acercarte a tu ligue en la segunda cita y subir un peldaño en vuestro nivel de intimidad.
¿Dónde ir en una segunda cita?
Por fin, has conocido a esa persona con la que chateabas por internet y parece ser que ha habido muy buen rollo.
Durante vuestra primera cita has descubierto que os sentís atraídos el uno por el otro, compartís algunos valores, tenéis los mismos gustos, disfrutáis de la compañía del otro y sí, que os sentís cómodos cuando flirteáis.
Ahora es hora de ir un paso más allá y de conocer a tu cita en un lugar más tranquilo y alcanzar un grado de intimidad más algo.
En una segunda cita se espera que dejes a un lado esos nervios que aparecen cuando intentas causar una primera buena impresión y que, en cambio, os deis una oportunidad para conectar profundamente y ver si hay posibilidades reales de iniciar una historia de amor que derive a una relación para toda la vida.
Una de las cosas a tener en cuenta a la hora de planear una segunda cita es escoger un lugar que dé pie a poder acercarte más a tu pareja y mantener una conversación intensa.
Mientras que ir a un bar en una primera cita es una gran idea porque te ofrece un ambiente más relajado para poder romper el hielo con la otra persona, en la segunda cita hay que ir un poco más lejos.
Por eso, lo mejor es ir al cine o a un restaurante ya que te puede dar más privacidad y es más fácil crear una conexión emocional con tu cita.
Ir al cine: La mejor actividad para iniciar una Segunda Cita
(Casi) Nada supera una segunda cita clásica de cine y palomitas.
Puedes descubrir un montón de cosas sobre tu cita tan sólo viendo el tipo de película que escoge.
Si vais a ver una comedia, significa que el sentido del humor es importante para tu cita.
Si veis una película de acción, ciencia ficción o de terror, es señal de que le encanta la aventura.
Otra opción es el cine de autor. Luego podéis pasaros un buen rato debatiendo sobre el mensaje de la película.
Otros géneros como los dramas históricos o los western son más arriesgados ya que no son del gusto de todos.
Algunos creen que ir al cine en una segunda cita es una pérdida de tiempo porque casi no hay tiempo para interactuar, pero eso no significa que no puedas comunicarte de otras maneras con tu cita.
De hecho, la cosa de que en el cine estáis sentados el uno al lado del otro a oscuras viendo una película, ya sirve como excusa para lanzarte e iniciar contacto físico con tu cita de una forma sutil.
Una tarde o noche de cine puede ser el aperitivo de una segunda cita memorable.
Ir a un restaurante en una Segunda Cita: ¡Seduce con comida!
Hay un viejo dicho que sugiere que la mejor manera de conquistar a un hombre es a través del estómago.
Es evidente que la comida juega un papel importante en el juego de la seducción, especialmente la comida afrodisíaca.
Para encender la llama de la pasión, no hay nada como ir a un restaurante chic donde podáis mantener una conversación profunda mientras disfrutáis de un gran banquete acompañado de un buen vino y un postre de lujo.
Una cena romántica en un restaurante para una segunda cita requiere cierta preparación.
Tienes que pensar sobre qué tipo de restaurante quieres llevar a tu cita.
Asegúrate de saber si tu cita tiene algunas restricciones con ciertas comidas: alergias, ingredientes que no le gusten o preferencias más exóticas.
No hay nada peor que invitar a tu cita a un restaurante de hamburguesas caseras gourmet y descubrir luego que él/ella es vegano/a.
En caso de que no sepas qué tipo de comida le gusta a tu cita, siempre podéis ir a un restaurante que ofrezca una gran variedad de platos de diferentes tipos de cocina.
Ir a cenar a un restaurante en una segunda cita requiere también seguir ciertos protocolos.
Debes considerar desde tu vestimenta hasta el tipo de vino que vas a elegir, desde los platos que vas a pedir o compartir con tu cita hasta quién debe pagar la cena.
La manera en que planees y te comportes durante tu segunda cita en un restaurante es decisiva para el futuro de vuestra posible relación.
A continuación, encontrarás un pequeño listado de cosas que sopesar si quieres triunfar en tu segunda cita cenando fuera:
- Reserva mesa en un restaurante que ofrezca un ambiente romántico y acogedor, así como carta de los más variada. Concreta previamente con tu cita para ver cuál es la mejor opción.
- La vestimenta es importante. Vístete para impresionar a tu cita si vais a un restaurante más chic. No hace falta que lleves algo muy sofisticado o super elegante, pero desde luego, no optes por llevar los típicos tejanos rotos. Para los hombres, lo mejor es llevar un poco o una camisa, unos pantalones y unos zapatos más formales. Para las mujeres, no hay nada como vestido y tacones.
- ¿Quién debe pagar en la primera cita? Hoy en día, ¡las citas son más feministas que nunca! Todavía existe ese debate sobre quién debe invitar a quién en una cita, si él o ella. Una solución justa es invitar a tu cita en esta ocasión a cambio de que ésta te invite a la próxima. Otra opción es dividirlo y pagar por partes iguales.
Tu segunda cita no debería ser tan estresante como la primera, pero eso no significa que tengas que dar según qué cosas por hechas.
En una segunda cita pueden pasar miles de cosas: puedes conocer a tu ligue en profundidad y realmente comprobar si estáis hechos el uno para el otro.
Es el momento perfecto para abrirte, revelar algunos secretos y crear una conexión emocional.
Una segunda cita es el paso previo a invitar a esa persona a una cena romántica en tu casa, ¡así que más vale jugar tus mejores cartas!